Se ha descubierto un enorme agujero en la capa de ozono en los trópicos, y podría afectar al 50% de la población mundial; según ha informado Qing-Bin Lu, profesor de la Universidad de Waterloo (Canadá).
El ozono es una molécula de gas altamente reactiva formada por tres átomos de hidrógeno. Según la Environmental Protection Agency (EPA) de EE. UU., el ozono se forma en la estratósfera o en niveles superiores de la atmósfera terrestre cuando la luz solar reacciona con el oxígeno molecular. Al ser altamente reactivo, el ozono se crea y destruye constantemente en la estratósfera, y su cantidad total ha permanecido relativamente estable a lo largo de las estaciones y latitudes durante décadas.
Aunque el proceso de formación y destrucción del ozono es continuo en la atmósfera, la presencia de ciertas sustancias químicas puede acelerar la destrucción. Un solo átomo de cloro en la estratosfera puede eliminar 100.000 moléculas, agotando gravemente los niveles de ozono.
¿Existe realmente un agujero en la capa de ozono?
Desde la década de 1970, los científicos han comprobado que los niveles de ozono se han agotado en ciertas regiones. Cuando los niveles de ozono se reducen hasta un 80% de sus valores normales, la región agotada se denomina agujero de ozono.
El agujero de ozono sobre la Antártida se ha observado con regularidad durante la temporada de primavera desde la década de 1980 y sigue siendo vigilado por las organizaciones. La pérdida de ozono se ha atribuido al uso de sustancias químicas como los clorofluorocarbonos (CFC), los hidroclorofluorocarbonos (HCFC), el tetracloruro de carbono y el metilcloroformo, lo que ha llevado a prohibir su uso.
El año pasado, el United National Environment Program (UNEP) publicó un informe en el que se afirmaba que la prohibición de estas sustancias químicas estaba ayudando a sanar la capa de ozono. Sin embargo, el nuevo descubrimiento va en contra de lo que todos los científicos han sabido y conseguido hasta ahora.
Un agujero de ozono en los trópicos
En un artículo de un solo autor publicado en la revista American Institute of Physics (AIP), Lu ha hecho la sorprendente revelación de que el agujero de ozono sobre los trópicos es en realidad siete veces mayor que el de la Antártida por el que nos hemos preocupado todos estos años. Peor aún es el hecho de que el agujero existe desde la década de 1980.
A diferencia del agujero de la Antártida, que aparece en primavera, el de los trópicos se ve durante todo el año.
Lu afirmó en el comunicado de prensa:
“El agotamiento de la capa de ozono puede provocar un aumento de la radiación ultravioleta a nivel del suelo, lo que puede aumentar el riesgo de cáncer de piel y cataratas en los seres humanos, así como debilitar el sistema inmunológico humano, disminuir la productividad agrícola y afectar negativamente a los organismos acuáticos y ecosistemas sensibles”.
Lu no utilizó los métodos fotoquímicos para la estimación del ozono que se utilizan convencionalmente. Sin embargo, sus conclusiones son coherentes con el cosmic-ray-driven electron reaction (CRE) (o modelo de reacción de electrones impulsada por rayos cósmicos) que Lu y sus colegas propusieron hace dos décadas. Los datos obtenidos también sugieren que el mecanismo de los agujeros de ozono antártico y tropical son idénticos.
El hecho de que las regiones tropicales constituyan la mitad de la superficie del planeta y alberguen a la mitad de la población mundial es bastante preocupante. Calificándolo de causa de “gran preocupación mundial”, Lu pidió en el comunicado de prensa “estudios minuciosos sobre el agotamiento del ozono, el cambio de la radiación UV, el aumento del riesgo de cáncer y otros efectos negativos sobre la salud y los ecosistemas en las regiones tropicales”.
Los hallazgos de la investigación han sido publicados en American Institute of Physics.
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Que interesante lo que afirmó Lu, “El agotamiento de la capa de ozono puede provocar un aumento de la radiación ultravioleta a nivel del suelo, lo que puede aumentar el riesgo de cáncer de piel y cataratas en los seres humanos, así como debilitar el sistema inmunológico humano, disminuir la productividad agrícola y afectar negativamente a los organismos acuáticos y ecosistemas sensibles”.
Pareciera que lo que provoca y a lo que se refiere es a los chemtrails con los que tenemos que lidiar a diario. Muy interesante!