En lugar de ir de la Tierra a la Luna, un equipo de científicos quieren anclar el sistema desde una torre en la Luna. Una torre en la Luna permitirá enviará satélites a una órbita geosíncrona.
Los científicos han creado una descripción matemática y física de un paradigma que podría hacerlo funcionar.
Zephyr Penoyre y Emily Sandford, científicos de la Columbia University y a cargo de la investigación, han escrito en su artículo:
Presentamos las derivaciones aquí como una descripción matemática y física completa e independiente del concepto. Los autores nos hemos sorprendido de encontrar quue es eminentemente plausible y puede haber sido pasada por alto como un paso importante en el desarrollo de nuestra capacidad como especies para moverse dentro de nuestro sistema solar”.
El transporte eficiente a la luna es la clave para el futuro asentamiento de humanos en otros planetas. La Luna puede actuar como una parada intermedia para viajar a Marte.
No es una idea nueva
La idea no es nueva, de hecho, fue propuesta por Arthur C. Clarke en su novela «Las fuentes del paraíso», que se publicó en 1979. Propuso un elevador de más de 41.000 kilómetros de altura que permitirá subir al espacio, luchando contra la gravedad. A su vez, facilitará el transporte de humanos y mercancías. Sin embargo, la teoría fue desechada porque ningún material era lo suficientemente fuerte como para hacer que la torre soportara su propio peso.
De hecho, una compañía canadiense, Thoth tecnology incluso ha registrado una patente por su propia idea de un ascensor espacial. Sin embargo, propuso una torre desde la Tierra hasta la Luna, que tendría 19 kilómetros de altura.
Incluso se rumoreaba que Google estaba trabajando en un proyecto similar en su laboratorio X.
Muchos han sugerido la idea antes, pero esta es la primera vez que alguien realmente proporciona las matemáticas que pueden hacerlo posible. La idea propuesta es realmente implementable, ya que utilizará más un skyhook que una torre.
Idea factible
Un material delgado y fuerte como el plomo utilizado en los lápices puede ser el ideal para implementarlo. Dado que el anzuelo será delgado, se puede hacer una línea larga: 362.000 kilómetros desde la Luna hasta la Tierra. Terminará a una distancia segura sobre la Tierra, donde se alejará de los efectos de la atmósfera o los satélites.
Cualquier vehículo que vaya a la Luna puede simplemente sincronizarse con la «Spaceline» y usar propulsión con energía solar para avanzar, sin usar combustible.
La construcción y el almacenamiento serán fáciles ya que Spaceline pasará por la tierra en el punto de Lagrange, que no tiene gravedad ni interferencia física.
El estudio indica:
Tener solo un pequeño equipo de científicos e ingenieros en dicho campamento base permitiría la construcción manual y el mantenimiento de una nueva generación de experimentos basados en el espacio: uno podría imaginar telescopios, aceleradores de partículas, detectores de ondas gravitacionales, viveros, generación de energía y puntos de lanzamiento para misiones al resto del sistema solar”.
El estudio científico ha sido publicado en el servidor de pre-impresión arXiv.org.
Fuente: IBTimes
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