La estructura de impacto más grande conocida del mundo se encuentra enterrada en lo profundo de la tierra en Nueva Gales del Sur, según explica el geólogo Andrew Glikson en un reciente informe para The Conversation.
El geólogo Andrew Glikson ha explicado en un ensayo sus últimas investigaciones que indican que un cráter de asteroide épico podría estar enterrado bajo el continente – y todas las pruebas apuntan a que es el más grande conocido en el planeta, por un margen enorme.
Conocida como la estructura Deniliquin, Glikson estima en su estudio, publicado en la revista Tectonophysics, que tiene más de 514 km de diámetro. Esto eclipsaría la mayor estructura de impacto confirmada, el cráter de Vredefort, en Sudáfrica, de unos 160 kilómetros de ancho, por no hablar del cráter de Chicxulub, de tamaño similar, que se cree que procede del asteroide que acabó con los dinosaurios.
Gilkson escribió:
“La historia del bombardeo de la Tierra por asteroides está en gran parte oculta”.
Geología ascendente
La existencia de la estructura de Deniliquin fue propuesta por primera vez a finales de los años 90 por Tony Yeates, coautor de este último estudio, basándose en patrones magnéticos. Un análisis de seguimiento que concluyó en 2020 confirmó la existencia de una gran estructura bajo una región del sur de Nueva Gales del Sur, aunque sin pruebas definitivas de que fuera causada por un impacto.
Usted se preguntará: ¿cómo es posible que una estructura tan enorme quede enterrada bajo nuestros pies, sin que nos demos cuenta?
Como explica Glikson:
“Cuando un asteroide impacta, crea un cráter con un núcleo levantado. Esto es similar a cómo una gota de agua salpica hacia arriba desde un cráter transitorio cuando se deja caer un guijarro en un estanque.”
Esta cúpula central levantada, añade, puede erosionarse a lo largo de millones de años, haciéndose menos prominente. Si el cráter no está simplemente enterrado por los sedimentos, una colisión entre las placas tectónicas de la Tierra también podría subsumir la estructura, ya que una placa que colisiona se ve forzada a quedar debajo de la otra.
Junto con el descubrimiento de la cúpula, hay otros indicios que identifican la estructura como un cráter de asteroide, como las ondulaciones simétricas de la corteza, causadas por las temperaturas extremas de un impacto, y las “fallas radiales” que suelen encontrarse en otras estructuras de impacto.
Extinción masiva
Lamentablemente, la mayoría de las pruebas reunidas hasta ahora sobre el Deniliquin son sólo de la superficie, y Glikson subraya la necesidad de perforaciones profundas para obtener “pruebas del impacto”.
No obstante, sus últimas investigaciones sugieren que el impacto del asteroide que lo creó se produjo hace unos 445 millones de años, coincidiendo con lo que se conoce como el evento de extinción masiva del Ordovícico Tardío, que acabó con el 85% de toda la vida en la Tierra.
Según Glikson, fue más del doble que la extinción de los dinosaurios a manos del impacto de Chicxulub. Uno se estremece al imaginar la escala de la gargantuesca roca espacial que forjó el Deniliquin.
Los hallazgos de la investigación han sido publicados en Tectonophysics.
[H/T: TC]
¿Te gustó este contenido? Te invito a compartirlo con tus amigos. También puedes seguirnos en nuestra Fan Page, para estar al tanto de todas las noticias que publicamos a diario. También puedes unirte a nuestro Grupo Oficial y a nuestra comunidad en Telegram.
0 comentarios