Un equipo de arqueólogos alemanes han desenterrado unas tijeras de 2.300 años, que sorprendentemente aún se encuentran afiladas, junto a otros objetos en una tumba de cremación celta. También se encontró una espada doblada y otros objetos.

Antigua tumba celta

Basándose en la variedad de los artefactos, que también incluyen una parte de un escudo, una navaja, un peroné (broche), una cadena de cinturón y una punta de lanza, los investigadores creen que allí fueron enterrados un hombre y una mujer. Entre los siglos III a. C. y II a. C., los celtas -que vivían en la Europa continental- quemaban a sus muertos y enterraban sus restos en fosas junto a sus pertenencias, según una declaración traducida.

Un equipo de excavación que buscaba artefactos explosivos de la Segunda Guerra Mundial descubrió los objetos por casualidad, según el comunicado.

Sin embargo, una tumba llamó la atención de los investigadores: el par de tijeras para zurdos.

Las tijeras aún estaban afiladas

Las tijeras están en perfecto estado para la edad que tienen. Crédito de imagen: Maximilian Bauer, Bavarian State Office for the Preservation of Monuments

Martina Pauli, arqueóloga de la Preservation of Monuments in Munich, dijo en un comunicado:

“Las tijeras, en particular, están en un estado excepcional. Uno casi estaría tentado de cortar con ellas. Las tijeras se utilizaban -como hoy- para cortar, pero también podían emplearse en el sector artesanal, por ejemplo en la elaboración del cuero o el esquileo de ovejas.”

Mientras que las tijeras de casi 12 centímetros (5 pulgadas) de largo se utilizaban probablemente para tareas cotidianas, Pauli cree que el armamento, incluida la espada plegada, “se utilizaba con toda probabilidad en batalla”. Es “bastante típico” encontrar espadas celtas dobladas de este modo en las tumbas, añadió.

Antes del enterramiento, la espada “fue calentada, doblada y, por tanto, inutilizada” y habría medido 76 cm de largo, según el comunicado.

Unas tijeras, una navaja y una espada doblada fueron algunos de los ajuares funerarios hallados en una tumba de cremación celta en Alemania. Crédito de imagen: Maximilian Bauer, Bavarian State Office for the Preservation of Monuments

Pauli dijo:

“Hay diferentes interpretaciones [que] van desde un punto de vista muy profano, es decir, que la espada simplemente tenía [un] mejor lugar en la tumba, hasta una interpretación cultual. Podría haber una variedad de motivaciones para la inutilización permanente: la prevención de los ladrones de tumbas, el miedo a los revenants [cuerpos que se levantan de entre los muertos], y similares”.

Pauli agregó:

“Los objetos funerarios indican personas socialmente superiores a las que se añadieron estos hallazgos de metales pesados. El enterramiento del hombre podría ser el de un guerrero, como indican las armas. La cadena del cinturón de la tumba de la mujer servía de cinturón que sujetaba y adornaba la túnica, quizá un vestido, en las caderas. El peroné singular de la tumba de la mujer también se utilizaba para sujetar un abrigo en el hombro”.

Los objetos se recuperaron y se llevaron a la oficina estatal de protección de monumentos para su custodia.

[Fuente: livesci | blfd.bayern.de]

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