Desde películas infantiles, hasta grandes producciones cinematográficas, los duendes y hadas siempre han captado el interés del público en general como seres que simbolizan la magia del universo, pero ¿son reales, o tan solo forman parte del imaginario popular?
Las hadas se pueden encontrar en el folclore de los celtas y los pueblos eslavos, así como en la historia de Inglaterra, Alemania y Francia, por nombrar solo algunas culturas. Muchos otros países también albergan cuentos populares que presentan criaturas similares, como el yokai japonés
Como era de esperar de una entidad con orígenes tan diversos, hay muchas historias diferentes sobre qué son las hadas y de dónde vienen. Debido a que se han transmitido a partir de una gran cantidad de tradiciones tan diversas y han pasado por una serie de filtros culturales para llegar a nuestro conocimiento en la actualidad, los posibles orígenes y explicaciones de las hadas son tan desconcertantes como todo lo demás sobre ellas.
Durante la Edad Media, muchas de las tradiciones cristianas que llegaron a dominar gran parte de Europa absorbieron la creencia existente en las hadas y las describieron como ángeles degradados o demonios, según las inclinaciones tanto del hada como del narrador. Otras tradiciones, incluidas las creencias paganas que precedieron a la cristianización del continente, los veían como todo, desde los espíritus de la naturaleza hasta los prehumanos prehistóricos y los espíritus de los muertos. En los medios populares de hoy, la concepción más común es que las hadas son espíritus de la naturaleza.
En última instancia, las hadas eran criaturas de la tradición oral y, al ser fluctuantes, fueron adaptándose según las necesidades culturales de la época y la de los narradores específicos que las citaban.
¿Por qué se las considera Hadas?
Los relatos folclóricos tienen una amplia variedad de respuestas. Muchos de los primeros cuentos de hadas giran principalmente en torno a dos detalles. Una son las historias de los cambiaformas, en las que los niños humanos son secuestrados por la gente hermosa y un hada con la capacidad de la transfiguración ocupa su lugar. La otra son formas de alejar a las hadas, romper sus hechizos o simplemente evitar su disgusto.
Existe una variedad de amuletos protectores que se dice que protegen contra las hadas, y uno de los más populares en la cultura moderna es el hierro frío. Otros incluyen campanas de iglesia, tréboles de cuatro hojas y usar la ropa al revés. Sin embargo, las protecciones específicas funcionan para hadas específicas, y rápidamente volveremos a la maleza si comenzamos a hablar sobre todas las diferentes variedades de hadas que se dice que existen a lo largo de la historia europea.
Dentro de estas variedades de hadas existen los brownies y hobgoblins, que a menudo hacen un trabajo útil en la casa, pero a veces pueden ser horribles a la vista. Hay banshees, cuyo gemido se dice que predice la muerte del oyente, o, en las Tierras Altas de Escocia, es posible que te encuentres con la Lavadora del Vado, una criatura con dedos de telaraña con una sola fosa nasal que lava la ropa ensangrentada los días en que alguien está a punto de morir. También hay caballos de agua y fuegos fatuos, sin mencionar hadas individuales con nombres personales como la siniestra Black Annis que colgó pieles humanas en el árbol fuera de su cueva, o Jenny Greenteeth, que ahogó a personas vulnerables en el río.
De los goblins a la nobleza, lo que todas las hadas tenían en común es que eran seres mágicos, inteligentes y caprichosos, a veces malignos, a veces benéficos, a menudo embaucadores, y casi siempre sujetos a leyes inescrutables que, no obstante, podían utilizarse para engañar, atrapar, protegerlos o repelerlos, siempre que uno tenga el conocimiento de cómo hacerlo.
Más allá de eso, las descripciones variaron enormemente, incluyendo las alas, quizás la característica visible más comúnmente atribuida a las hadas hoy en día, que es más una adición victoriana al canon de las hadas que una parte de la tradición original.
¿Por qué se sigue hablando de hadas actualmente?
Para gran parte del mundo de habla inglesa, al menos, las hadas tienen una penetración cultural más influyente que la mayoría de las otras criaturas mitológicas. Se las puede encontrar en camisetas, esculturas, obras de arte y una variedad de otros medios y mercancías con imágenes de hadas, e innumerables personas todavía ponen gnomos de césped en sus patios delanteros. En cuanto a las criaturas míticas, solo los dragones pueden presumir de una huella similar en la cultura popular contemporánea.
La mención más antigua sobre las hadas registrada en inglés se remonta al siglo XIII, pero en ese momento, cuando el historiador Gervase de Tilbury escribió sobre ellas, el término ya era de uso común.
Los romances medievales presentaban numerosas historias de encuentros entre caballeros y gente justa, algunas de las cuales llegaron a la leyenda artúrica en el siglo XIV. Quizás el más famoso de ellos es la historia de Sir Gawain y el Caballero Verde, llevada al cine recientemente.
Las épocas victoriana y eduardiana en Inglaterra vieron un resurgimiento del interés en estas viejas historias, y se podría decir fácilmente que el hada moderna es un producto de estos victorianos que redescubrieron el folclore antiguo de épocas pasadas.
Algunos de los más grandes escritores ingleses de la época reformularon o reinventaron a las hadas para una variedad de usos, y los cuentos de hadas ocuparon un lugar preponderante en la conciencia pública como motivos de ficción más que como tradiciones folclóricas. Las primeras historias de Peter Pan de JM Barrie se escribieron durante este tiempo; y María de Teck, que fue reina desde 1910 hasta 1936, tenía un interés permanente por el arte de las hadas.
Además de llevar las hadas a la imaginación del público de una manera nueva, los victorianos hicieron algo más: codificar gran parte de lo que hoy consideramos la tradición de las hadas. Al elegir qué historias y tradiciones volvieron a contar y cómo se representaron las hadas en el arte, tuvieron un impacto duradero en la idealización de las hadas durante el próximo siglo, un impacto que todavía aún perdura en la actualidad.
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¿Existen las hadas?
Como los críptidos y los ovnis, que de alguna manera han tomado el lugar de las hadas en las creencias actuales, siempre se enfrentarán las dos vertientes en torno a su existencia.
Algunos escépticos toman como ejemplo lo que probablemente fue el engaño de hadas más famoso de todos los tiempos, las llamadas fotografías Cottingley Fairy, que incluso lograron convencer a Sir Arthur Conan Doyle, el creador de Sherlock Holmes.
Las fotografías en cuestión, cinco en total, fueron tomadas por dos primas, Elsie Wright y Frances Griffiths, entre 1917 y 1920. En el momento en que se tomaron las dos primeras fotografías Elsie tenía 16 años y Frances 9. La madre de Elsie creía que las dos primeras fotos fueron genuinas, y finalmente las llevó a una reunión de la Sociedad Teosófica, lo que captó la atención de Arthur Conan Doyle.
Doyle, un espiritualista devoto, quizás estaba demasiado ansioso por creer en la autenticidad de las fotos, y las utilizó para ilustrar un artículo sobre el tema que le habían encargado que escribiera para The Strand. Esto, más que cualquier otra cosa, puso las fotografías a la vanguardia de la imaginación del público, donde permanecerían de forma intermitente durante los años venideros.
Por su parte, las dos chicas insistieron en que las fotos eran auténticas, llegando a tomar tres más en 1920, a instancias de Edward Gardner, miembro de la Sociedad Teosófica y conocido de Doyle, quien les proporcionó a las chicas una cámara cada uno, junto con placas marcadas en secreto. Gardner y Doyle mostraron las fotografías a expertos, incluidos técnicos de la empresa Kodak, quienes concluyeron que los resultados “no mostraban signos de falsificación”.
Sin embargo, el público no siempre fue tan crédulo. El novelista y poeta Maurice Hewlett escribió en la revista literaria John O ‘London’s Weekly:
“Y conociendo a los niños y sabiendo que Sir Arthur Conan Doyle tiene piernas, decido que [ellos] han tirado de una de ellas”.
Quizás, lamentablemente para los aspirantes a creyentes, los escépticos demostraron estar en lo cierto, aunque la verdad no salió completamente a la luz durante muchos años. De hecho, no fue hasta 1983 que las dos niñas —ahora dos mujeres en edad avanzada, las cuales estarían muertas dentro de una década— finalmente admitieron su engaño.
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En un artículo publicado en la revista británica The Unexplained, confesaron no solo que habían falsificado las fotografías de Cottingley Fairy, sino cómo. La verdad, como suele ser el caso, resultó ser decepcionantemente prosaica.
Copiaron ilustraciones de bailarinas del Libro de regalos de la princesa María, un popular libro para niños de la época, y les dibujaron alas, luego las recortaron y usaron alfileres para apuntalarlas para las fotografías. Nada más elaborado ni más sobrenatural que eso.
Sin embargo, aunque ambas admitieron el engaño, mantuvieron, incluso entonces, que realmente habían visto hadas. Elsie dijo que todas las fotografías eran engaños, pero Frances dijo que la quinta fotografía era auténtica. En una entrevista de 1980, Frances dijo sobre la quinta fotografía, “era la tarde lluviosa de un sábado y estábamos jugando con nuestras cámaras y Elsie no tenía nada preparado. Vi a estas hadas acumularse en la hierba y simplemente apunté con la cámara y tomé una fotografía.”
En cuanto a por qué mantuvieron la artimaña durante tanto tiempo, en una entrevista de 1985 en el programa de televisión, Elsie afirmó que simplemente estaban demasiado avergonzadas para admitir la verdad después de asimilar tan a fondo a un personaje tan estimado como Sir Arturo Conan Doyle.
“Nunca pensé en ello como un fraude”, dijo, “era solo que Elsie y yo nos divertíamos un poco y no puedo entender hasta el día de hoy por qué los engañaron … querían que los engañaran.”
Posiciones a favor de la existencia de las hadas
La ocultista Dion Fortune analiza a fondo este tema en su artículo: Contactos no humanos en el plano astral, donde sugiere la posibilidad que las criaturas astrales, entre ellas, las Hadas, son capaces de alterar el curso normal de la concepción.
Dion Fortune sostiene que, en ese momento, se produce una especie de vórtice que atrae a las almas desencarnadas. El problema ocurre cuando lo que se encarna en el embrión no es un alma humana, sino algún espíritu elemental, concibiendo criaturas que físicamente son humanas, pero que espiritualmente resultan inclasificables.
Durante la adultez, los hijos de las hadas son reconocidos por su torpeza en el andar, cierto aislamiento, la piel con un tono verdoso, hambre voraz y una mucha dificultad para adaptarse a las normas sociales.
Las hadas pertenecen a un plano de existencia distinto del nuestro; y no puede vérselas en cualquier momento. La hora más propicia para encontrarse con un hada es durante el amanecer y el crepúsculo, tal vez como una metáfora sobre la transición entre el día y la noche.
Las hadas que se muestran amables con los humanos son siempre las llamadas Hadas Comunitarias. Si bien puede vérselas revoloteando solas entre las flores o bajo los árboles, pertenecen a una comunidad que son gobernados por una Reina. Estas comunidades suelen estar organizadas en pequeñas aldeas dirigidas por una especie de aristocracia local.
Los encuentros con las Hadas siempre revelan algo de su personalidad. Si el encuentro se produce entre un humano adulto y un Hada, es habitual que el inicio sea alguna broma o travesura. Si, en cambio, el encuentro se produce entre un Hada y un niño, casi siempre incluye algún tipo de bendición, como dotar al pequeño de una visión extraordinaria para advertir el mundo invisible que nos rodea.
Se dice que los encuentros entre las Hadas y las mujeres no suelen terminar bien para éstas últimas. La tolerancia de las Hadas hacia los hombres se debe a los que consideran como torpes niños extraviados, pero no soportan ni el más leve atisbo de ofensa, de jactancia o de vanidad cuando están frente a una mujer. Si la mujer logra superar esta primera prueba puede ganarse el respeto del Hada, pero nunca, salvo en casos excepcionales, su amistad.
Las Hadas Unseelie son algo así como el lado oscuro de estos seres. Para esta categoría no hace falta ofenderlas para que descarguen su ira sobre los humanos. Solo suelen agruparse para realizar tropelías de mayor calibre, destellando bajo la sombra de los árboles como pequeñas estrellas para atraer a los incautos. No es extraño que estos encuentros terminen en la muerte y la locura. Son innumerables las historias donde las Hadas Unseelie obligaron a sus víctimas a bailar hasta morir de agotamiento.
En las leyendas no queda claro las razones que hacen que un humano se vuelta interesante para las Hadas, o qué cuáles son los motivos que las alteran irreversiblemente. Incluso las Hadas más temibles tienen humanos favoritos, a quienes vigilan y ayudan secretamente. El único pago que exigen es discreción y una absoluta disponibilidad para acceder a sus caprichos.
¿Evidencias de la existencia de las hadas?
Una fotógrafa profesional llamada Lisa Wildgoose, residente de la localidad de Northampton, Inglaterra, relató a la prensa que después de fotografiar paisajes y flores en un bosque local, revisó en su casa el material visual y quedó sorprendida por una misteriosa fotografía donde aparecía una pequeña figura alada revoloteando sobre una flor. Esta figura no sólo parecía tener una forma antropomórfica, sino que también parecía tener el cabello rubio y unas zapatitos brillantes.
Lisa estaba al principio muy sorprendida y asustada. Primero pensó que podía ser una mosca o un insecto exótico, pero cuando sus dos pequeñas hijas vieron la imagen les causó la misma impresión. Ellas reaccionaron inmediatamente relacionando la imagen con un hada. La fotógrafa agrega que algunas personas creen que sólo se trata de un insecto extraño, pero cuando se mira bien puede apreciarse que ese ser alado tiene cabello rubio y usa unos zapatos brillantes, lo que es más que una coincidencia. Lisa asegura que la imagen no ha sido alterada digitalmente para hacer que se parezca a otra cosa.
Las “Hadas de Rossendale”
La polémica fotografía captada por Lisa Wildgoose hizo recordar a las famosas “Hadas de Rossendale”, una serie de fotografías de pequeñas criaturas aladas que fueron captadas en el año 2014 en el valle de Rossendale por John Hyatt, profesor de investigación técnica de la universidad de Manchester y fotógrafo profesional. En las fotografías captadas por Hyatt pueden verse una especie de pequeños seres con alas brillantes y extremidades. El fotógrafo afirma “Hay que ver estas fotos con la mente muy abierta y la gente puede decidir por sí misma de qué se tratan. Pero yo, por lo menos, puedo asegurar que se trata de hadas. En la misma zona de Rossendale tomé otras fotos de moscas, mariposas y otros insectos alados, y las imágenes se veían totalmente distintas”.
Entonces, ¿las hadas son reales? Tal vez no, pero nuestra fe en ellos lo es, y también nuestro deseo de que esa creencia se confirme. Y mientras creamos en la magia, eso probablemente nunca cambiará…
Bibliografía
Sitios web:
- Duendes y hadas: ¿existen realmente?
https://osr.org/es/blog/magico/duendes-y-hadas-existen-realmente/ - ¿De dónde vienen los cuentos de hadas?
https://www.bbc.com/mundo/noticias/2014/12/141223_vert_cul_origen_cuentos_hadas_finde - Hadas: historia, leyenda, de dónde provienen y curiosidades
https://okdiario.com/curiosidades/hadas-origen-leyenda-2292934 - 5 mitos sobre las hadas
http://elespejogotico.blogspot.com/2012/06/5-mitos-sobre-las-hadas.html - Razas y distintas especies de Hadas
http://elespejogotico.blogspot.com/2013/12/razas-y-distintas-especies-de-hadas.html - Reino de las hadas: Cómo comunicarse con los elementales y espíritus de la naturaleza
http://elespejogotico.blogspot.com/2014/09/reino-de-las-hadas-como-comunicarse-con.html - ¿Existen las hadas? Dos fotografías tomadas en los bosques pretenden demostrar que sí
https://www.guioteca.com/fenomenos-paranormales/existen-las-hadas-dos-fotografias-tomadas-en-los-bosques-pretenden-demostrar-que-si/
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