Es posible que cuando pensemos en un duende, nos venga a la mente una figura pequeña, graciosa y simpaticona, tal vez no muy malintencionada que corretee por el bosque internándose en sus escondrijos pero la figura del duende es mucho más que esta agradable idea.
Como veremos, personajes similares pueden encontrarse por todo el mundo, desde los hogares en la antigüedad, hasta bosques, selvas y montañas nevadas, pero si algo caracteriza a los duendes, es su extraña moralidad…
Duendes
Normalmente se les identifica como los “dueños de la casa”, se trata de criaturas sobrenaturales, a veces también espíritus o deidades menores que físicamente acostumbran a ser humanoides, de pequeño tamaño, muchas veces cubiertos de pelaje o invisibles (algo que les relacionaría con el reino de los espíritus), con una marcada asociación con la naturaleza pero que también pueden actuar como espíritus del hogar.
Carácter de los duendes
Uno de los puntos más importantes que hay que tener en cuenta sobre los duendes es su naturaleza ambivalente dado que en la mayoría de los relatos no parecen participar de la misma moralidad que los seres humanos.
Y los hay de todo tipo, malévolos y traviesos, bondadosos y protectores o neutrales manifestando con frecuencia que no les importan los asuntos humanos.
Pero todo puede cambiar con rapidez. Por ejemplo, según una buena cantidad de relatos (y sucede de forma similar por todo el mundo) un duende del hogar que se sienta bien tratado por la familia humana que habite en la misma casa, podría proteger el lugar e incluso llegar a ayudar con algunas de las labores domésticas, desde limpiar o cuidar el fuego hasta alimentar al ganado pero, sucede que estas criaturas parecerían ofenderse con facilidad y cosas como que sintieran que no estarían recibiendo las ofrendas adecuadas o que los humanos a su alrededor utilicen un lenguaje soez harían que el duende quisiera buscar venganza.
Venganza
Y esta venganza puede ser con simples travesuras no demasiado malévolas como cambiar las cosas de sitio en el hogar, abrir o cerrar las puertas de pronto o molestar al ganado. Unas descripciones muy similares a lo que sucedería con los fenómenos de poltergeist en el ámbito paranormal.
Pero en otras ocasiones, y según la leyenda, estas represalias sí que podrían entenderse como algo más maliciosas o incluso malévolas, véase: asustar por las noches a los miembros de la casa o llegar a querer causar daño físico pellizcándoles y hasta existen relatos sobre estrangulaciones hasta la asfixia, así tal cual, un duende acabando con la vida de un ser humano.
Muchos duendes
Leyendas sobre duendes existen en casi todas las culturas. Presentaremos pues algunos ejemplos de la extensa lista:
- Domovói: Seres del folklore eslavo, protectores del hogar, los niños y la familia en general aunque al enfadarse podían decidir marcharse dejando al hogar sin su protección y por supuesto, harían muchas travesuras si no se les trata bien.
- Dokkaebi: Seres de las leyendas coreanas que tendrían la habilidad de poseer objetos de la casa que con frecuencia son representados con una sola pierna.
- Kobold: Seres propios de Alemania, con la capacidad de cambiar de forma a voluntad, también entendidos como espíritus del hogar que pueden ayudar con algunas labores domésticas siempre que no se les enfade, en tal caso, comenzarían las travesuras.
- Brownie: Seres que se encuentran en el folklore escocés que responden a los comportamientos típicos ya comentados, ayudarían con las labores del hogar por las noches, mientras la familia estuviera durmiendo pero que pueden ofenderse con facilidad.
Existen muchísimos duendes documentados, algunos de ellos con características o capacidades muy singulares. Nuestra compañera Sonia Gupta del canal AEnigma junto con Pablo Ruíz y Óscar Robles presentan este tema con mayor extensión en el siguiente video:
Como lector de CODIGO OCULTO, lo invitamos a unirse a nuestro foro oficial para debatir sobre enigmas, ciencia y actualidad con personas de ideas afines de todo el mundo. ¡Unirse es gratis, regístrese ahora!
0 comentarios