Un equipo de científicos han desarrollado cerebros de mono más grandes al agregar un gen exclusivo de humanos en fetos de mono tití.
Según los investigadores, este avance podría ayudar a determinar cómo este gen nos ayudó a hacernos humanos.
La investigación publicada en la revista Science fue realizada por científicos del Max Planck Institute of Molecular Cell Biology and Genetics. Comprendió agregar el gen humano en fetos de 101 días (50 días antes del nacimiento) de titíes comunes.
El experimento produjo en los monos un neocorteza agrandada. La neocorteza es una parte de la corteza cerebral que es excepcionalmente más grande en humanos si se compara con la de otros primates. Además es responsable de las habilidades cognitivas avanzadas, como el razonamiento y el lenguaje.
¿El inicio del «Planeta de los Simios»?
Este ensayo podría hacernos cuestionar si la ficción esta cada vez más cerca de la realidad, es decir si los primates podrían adoptar características más humanas.
Se sabe que una neocorteza más grande brinda habilidades cognitivas a los humanos, y jugó un papel fundamental en la historia evolutiva de los humanos y otros homínidos.
El gen utilizado en este experimento es ARHGAP11B, gen humano específico que se desarrolló en nuestro linaje luego de la divergencia de los chimpancés, pero antes de nuestra separación con los neandertales y denisovanos, con lo que (obviamente) también compartíamos dicho gen.
No es la primera vez que este gen es colocado en animales. Anteriormente se había realizado experimentos similares con ratones y hurones, sin embargo es la primera vez que se ha demostrado que posee el mismo efecto de agrandamiento cerebral en un primate no humano.
Michael Heide, autor principal del estudio, dijo en un comunicado:
“De hecho, descubrimos que la neocorteza del cerebro del tití común se agrandaba y la superficie del cerebro se doblaba. Su placa cortical también era más gruesa de lo normal. Además, pudimos ver un mayor número de progenitores basales de la glía radial en la zona subventricular externa y un mayor número de neuronas de la capa superior. Este tipo de neurona cortical aumenta en la evolución de los primates”.
Sobre los problemas éticos de someter a monos tití a experimentos como este, los investigadores señalaron que los fetos que utilizaron en este ensayo se trataron con altos estándares éticos y no se los llevó a término.
Wieland Huttner, investigador cuyo laboratorio dirigió todos los estudios aquí mencionados, dijo en un comunicado:
“Dejarlos nacer, en mi opinión, habría sido irresponsable como primer paso, porque no sabes qué tipo de cambio de comportamiento obtendrás”.
El estudio científico ha sido publicado en la revista Science.
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