Los parásitos astrales se alimentarían de la energía vital, haciéndonos sentir debilitados y deprimidos.

Parásitos astrales y larvas astrales serían igual que un parásito físico: adheridos a un huésped y succionando energía (del aura humana en este caso). Estarían configurados en las frecuencias electromagnéticas del Plano astral o cuarta dimensión. Estos entes generan bajas vibraciones y las mantienen así, afectando a la mente y cuerpo del ser humano. Pueden surgir en lugares con mucha muerte y energía negativa, como en campos de batalla o donde hubo desastres naturales.

Ambos tipos de entes se adhieren al llamado cuerpo astral, una contraparte más etérea de nuestro cuerpo físico (el aura es energía emanada del espíritu y cubre los cuerpos físico y astral). Los parásitos y larvas astrales serían otros de los errores del universo creados en esa cuarta dimensión.

Versión abstracta de un parásito astral, imagen ilustrativa. Crédito: darksouls1 / Pixabay.

Diferencias entre Parásitos y Larvas astrales

Ambos son parásitos, con la diferencia de que las larvas son organismos más rudimentarios, como gusanos etéreos (a como dice su nombre). Un parásito abarca más tipos de entes: pueden ser seres elementales, espíritus de la naturaleza y pueden verse en varias formas: ya como insectos, artrópodos pequeños o arañas (las visiones son pesadillescas).

Las larvas astrales surgen de residuos de energía salidos de pensamientos y emociones negativos de las personas, y se acumulan en lugares con mucho sufrimiento y muerte (hospitales, cementerios). Las larvas pueden crecer y adquirir su propia consciencia, convirtiéndose en una criatura más compleja.

Una cita de Paracelso, aparecida en De Ente Spirituali:

Una mente sana es un castillo que no puede ser invadido sin la voluntad de su amo; pero si a ellos [las larvas] se les permite entrar, éstas excitan las pasiones de los hombres y las mujeres, crean ansias en ellos, ellos producen malos pensamientos que actúan perjudicialmente en el cerebro, ellos agudizan el intelecto animal y sofocan el sentido moral”.

Imagen de un protozoo. Los que han observado larvas astrales (en viajes astrales) los han descrito con una forma similar. Crédito: Frank Fox / Wikimedia commons.

Síntomas del parasitismo astral

Lo más atemorizante es que actualmente habría una proliferación de parásitos y larvas astrales, creados a través de todas las acciones negativas en la historia de la humanidad, como guerras y asesinatos. Otro origen crucial son los rituales de magia negra, ya que se pueden crear a través de los malos pensamientos, tomando vida a partir de las repeticiones de cánticos y rezos.

Se piensa que estos vampiros energéticos no serían inteligentes por sí mismos, solamente andarían desplazándose buscando huéspedes energéticos. Si se es víctima de ellos se pueden experimentar síntomas como: fatiga crónica, depresión, ansiedad, ataques de ira, ataques de pánico, insomnio, pesadillas… es una afectación psíquica, aunque también se presentan dolencias físicas.

Un demonio y vampiro energético, similar a los parásitos astrales. Pintura de Henry Fuseli (dominio público).

Para eliminar o repeler a los parásitos astrales lo más sencillo es la meditación, la práctica de pensamientos positivos. Esto los repele (especialmente a las larvas). Otro de los métodos clásicos es sumergirse en aguas de corrientes (como bañarse en un río), además de baños con aceite de limón o con infusión de cáscara de limón (rituales de limpieza energética).

Esta es una información espiritual valiosa porque extiende el concepto del plano astral, con entidades que nos podrían estar afectando de una forma energética y metafísica.

Referencias: HermandadBlanca / BibliotecaPleyades / AlchemyRealm / Patheos.

Una publicación de CodigoOculto.com – Todos los derechos reservados. Prohibida su copia sin autorización.