Investigadores japoneses han desarrollado un plástico que se disuelve en agua de mar en cuestión de horas, lo que ofrece una posible solución a una lacra moderna que contamina los océanos y daña la fauna y la flora marinas.

Aunque los científicos llevan mucho tiempo experimentando con plásticos biodegradables, los investigadores del RIKEN Center for Emergent Matter Science y la University of Tokyo afirman que su nuevo material se descompone mucho más rápidamente y no deja residuos.

Esta innovación, liderada por el Dr. Takashi Nishikawa y su equipo en Japón, supone un gran avance en la lucha contra la contaminación plástica, al tiempo que contribuye a la sostenibilidad de la agricultura.

¿Cómo producen el nuevo plástico?

El plástico se fabrica mediante una novedosa combinación de hexametafosfato de sodio, un aditivo apto para el consumo humano, y monómeros a base de guanidinio.

Estos componentes crean puentes salinos que mantienen unida la estructura del plástico hasta que se expone al agua de mar.

En un laboratorio de la ciudad de Wako, cerca de Tokio, el equipo demostró que un pequeño trozo de plástico desaparecía en un recipiente con agua salada después de agitarlo durante aproximadamente una hora.

Un investigador muestra una muestra de plástico degradable en el océano en el Centro de Ciencia de Materias Emergentes (CEMS) de la institución de investigación japonesa Riken, en Wako, prefectura de Saitama, Japón. Crédito de imagen: REUTERS / Manami Yamada

Se disuelve en el agua de mar

Una vez sumergido, el material comienza a disolverse en cuestión de horas, sin dejar residuos microplásticos. En el suelo, se descompone completamente en unos diez días y libera nutrientes como el fósforo y el nitrógeno, fundamentales para promover el crecimiento de las plantas y aumentar la fertilidad del suelo.

Lo que hace que este material sea especialmente prometedor es su proceso de descomposición no tóxico, no inflamable y neutro en carbono. A diferencia de los plásticos convencionales, contribuye positivamente al medio ambiente en lugar de causarle daños.

En las pruebas, se pudo recuperar y reutilizar hasta el 91 % de los compuestos aditivos y el 82 % de los monómeros, en consonancia con los principios de la economía circular.

Aunque el equipo aún no ha detallado ningún plan para su comercialización, el director del proyecto, Takuzo Aida, afirmó que su investigación ha despertado un gran interés, incluso entre los profesionales del sector del embalaje.

Se observa la muestra de plástico de colores degradable en el océano que se agita y se disuelve en agua salada durante una demostración en el Centro de Ciencias de la Materia Emergente (CEMS) de la institución de investigación japonesa Riken, en Wako, prefectura de Saitama, Japón. Crédito de imagen: REUTERS / Manami Yamada

Durabilidad y uso

El nuevo material es tan resistente como los plásticos derivados del petróleo, pero se descompone en sus componentes originales cuando se expone a la sal. A continuación, esos componentes pueden ser procesados por bacterias naturales, lo que evita la generación de microplásticos que pueden dañar la vida acuática y entrar en la cadena alimentaria.

Dado que la sal también está presente en el suelo, una pieza de unos cinco centímetros (dos pulgadas) se desintegra en tierra después de más de 200 horas, añadió.

El material puede utilizarse como el plástico normal cuando se recubre, y el equipo está centrando su investigación actual en los mejores métodos de recubrimiento

Takuzo Aida, director del Grupo del Centro RIKEN para la Ciencia de la Materia Emergente (CEMS), muestra una muestra de plástico degradable en el océano en el CEMS de la institución de investigación japonesa Riken, en Wako, prefectura de Saitama, Japón. Crédito de imagen: REUTERS / Manami Yamada

¿Cuáles son las aplicaciones del nuevo plástico?

La versatilidad del plástico abre la puerta a una amplia gama de aplicaciones. En la agricultura, puede utilizarse para fabricar films de acolchado biodegradables y recubrimientos para semillas.

En entornos marinos, ofrece una alternativa sostenible a las redes y cuerdas de pesca que, de otro modo, contribuirían a la contaminación por “artes de pesca fantasma”.

También es prometedor para productos de consumo como envases de alimentos, cubiertos desechables y envases ecológicos.

Lucha contra la contaminación de los plásticos

Científicos de todo el mundo compiten por desarrollar soluciones innovadoras a la creciente crisis de los residuos plásticos, un esfuerzo impulsado por campañas de concienciación como el Día Mundial del Medio Ambiente, que se celebró el 5 de junio.

La contaminación por plásticos se triplicará para 2040, según las previsiones del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, lo que supondrá entre 23 y 37 millones de toneladas métricas de residuos adicionales en los océanos del mundo cada año.

Esta innovación de los científicos japoneses podría reducir significativamente los residuos plásticos a nivel mundial y marcar el comienzo de una nueva era de materiales biodegradables, reciclables y ricos en nutrientes, con un potencial real para transformar tanto los esfuerzos de limpieza medioambiental como las prácticas agrícolas sostenibles.

[FT: Reuters]

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Por: CodigoOculto.com