¿Sientes constantemente que no perteneces a este mundo?, bueno, no eres el único. Estas 4 razones podrían indicar que eso que sientes es algo bueno.
La aspiración de pertenecer a algo superior es, desde luego, una necesidad propia que tenemos, donde puede caber la posibilidad que se deba a nuestro origen evolutivo.
A medida que nos vamos desarrollando en la vida pensamos que para tener felicidad debemos pertenecer a una familia, a un círculo social, a un país o a una sociedad
Sin embargo pueden existir casos excepcionales de personas que no experimentan esa necesidad, incluso tienen la sensación que no son parte de este mundo; por eso estos individuos estiman que son distintos al resto de los demás y no solo eso; le gustan las cosas diferentes, sus pensamientos y prioridades no son las mismas que el resto de la humanidad.
No obstante, se debe considerar que no tienen nada malo, al contrario toda esa composición pudiera ser un aviso de que se trata un ser que posee mayor sensibilidad y conciencia.
Se pueden encontrar muchas clases de individuos que posean estas cualidades, vamos a analizar 4 categorías de ellos:
Empatía
La empatía hacia la vida y el planeta podría ser unas de las cualidades más representativas. Crédito: skeeze / Pixabay
Las personas con mucha empatía son de por sí muy sensibles, al punto de que las emociones y energías negativas de las demás personas les afectan considerablemente y puedan sentir incomodidad de estar a su alrededor.
Para el empático el solo hecho de ver noticieros con tragedias, con malas noticias o conocer de alguna desgracia, sin importar que desconozca a la persona que la padece, puede llegar a afectarle.
Y es que en la actualidad lo más común que se ve es crueldad, codicia, maldad, violencia, que lleva todo ser empático a pensar que está en un mundo donde no puede dejar de sufrir ni sentir esa sensación de desapego.
Almas viejas
Las almas viejas, en su mayoría, no sienten que pertenecen a este planeta. Crédito: Sasin Tipchai / Pixabay
Algunas personas cuando crecen sienten que no pertenecen al mundo actual en el que viven, y se apasionan por cosas que ya no son tan populares, esto los hace ser distintos incluso pueden ser causa de burlas por parte de otros.
Hasta en las etapas de la infancia o adolescencia fueron diferentes, sintiéndose fuera de este mundo e inadaptados. Estas personas, comúnmente, son «almas viejas»
Con la adultez es mayor la división que los separa, pero ellos logran encontrar su sendero en la vida, y no les importa lo que piense el resto.
Pensadores profundos
Los pensadores profundos son aquellas personas que analizan realmente lo que está bien o mal antes de hacer algo. Crédito: Free-Photos / Pixabay
Hoy en día la mayoría actúa de una manera donde la prioridad son las necesidades materiales y los impulsos primitivos son lo más importante.
Es por eso que los seres que tienen la capacidad de pensar detenidamente y en profundidad puedan sentir que no son de este mundo
Un pensador profundo conoce lo que realmente es importante, y observar a personas que solo piensan en banalidades y tratando de alcanzar objetivos fugaces o sin sentido los decepciona profundamente, al punto de llegar al punto de cuestionarse qué hacen en un planeta como éste, y de tener la sensación de que no pertenecen aquí.
Pueden estar experimentando un despertar espiritual
El despertar espiritual de las personas podría ser la respuesta a donde pertenecemos. Crédito: Pexels / Pixabay
- La insólita sensación de no pertenecer a este mundo, ¿la has sentido?
- Ángeles encarnados en la Tierra: ¿Quiénes son, cómo identificarlos y cuál es su misión?
- Almas viejas están llegando a este mundo en nuevas generaciones de niños ¿cómo reconocerlos?
Despertar espiritualmente es una vivencia que lleva a un nivel superior de conciencia, transformando a la persona en un individuo en evolución espiritual.
Pero esto viene seguido de experiencias y sentimientos que pueden causar dolor debido a que los cambios radicales no se dan con facilidad.
Además de surgir interrogantes sobre su existencia, también tratará de reconsiderar las decisiones que tome en sus relaciones y su propia vida, además sentirá una separación de las personas cercanas y de toda la humanidad en general.
Esto se debe a la elevación del nivel de conciencia que está experimentando y porque va a comprender cosas a las que antes no les daba importancia.
Cuándo entendemos nuestros sentimientos
Cuando descubrimos qué son esos sentimientos podría abrirnos el camino a la plenitud. Crédito: mcredifine / Pixabay
Es posible que en algún punto de tú vida hayas sentido cualquiera de las sensaciones expresadas en los 4 puntos anteriores y no supieras qué significaba.
Testimonios
Ese puede ser el caso del usuario «engelbert», quién comentó lo siguiente en un anterior artículo titulado «La insólita sensación de no pertenecer a este mundo, ¿la has sentido?» y referido a esta misma temática:
Hermano que el universo te premie en demasía en este artículo has dado respuesta a una interrogante que me agobia en demasía, que ni terapeutas ni religiones ni drogas han logrado calmar esa ansiedad yo creí que estaba loco en verdad ¡Tal vez el camino a la espiritualidad me logra ayudar! mil gracias y bendiciones”
Es normal que, en ocasiones, no podamos encontrar las respuestas por nuestros propios medios y, en ocasiones, ni siquiera sabemos cómo expresar lo que sentimos, pero cuando encontramos la verdad, la luz se abre ante nuestros ojos y sabemos cómo actuar a consecuencia porque nuestro despertar espiritual está ahí, esperándonos.
Otro ejemplo podemos encontrarlo en la usuaria «Susana»:
Desde pequeña esperando volver a casa… hoy, con 49 años ya, aún no sé cómo lidiar con este plano de existencia. Siento amor, siembro amor, me llena el amor por mis hermanos humanos y por todo ser viviente. Pero al llegar el descanso y el momento de estar a solas conmigo sufro y extraño mi lugar allá en las estrellas.
Vivo en RapaNui, Isla de Pascua, llegué hasta acá para rescatarme. He trabajado en mí ser como verdadera ermitaña… no tengo seres que vibren en mi frecuencia. Me encuentro con el rechazo de mis pares y eso me duele pues yo sólo sé amarlos. Pero genero anticuerpos con personas que no pueden creer que no tenga maldad mi actuar.
Bueno… aquí sigo. No sé hasta cuándo”.
Es común que no encontremos una razón para seguir con nuestro camino, ese camino que, aunque no lo parezca, no hemos elegido, sino que nos han encomendado. Cada vida en este mundo tiene un propósito y el de algunos es el de mejorarlo y ayudar a cada persona a ser mejor. Como unos mensajeros llenos de empatía por los seres de este mundo.
Lo mejor es abrazar ese camino, esas vibraciones que desprendemos y que hacemos llegar a los demás. Es posible que el despertar espiritual tarde, pero llegará y cuando lo haga, el sentimiento de plenitud no se comparará con nada.
El amor a los seres vivos y al planeta podría ser una clara muestra de que tenemos una misión en la Tierra. Crédito: Snapwire / Pexels
- El despertar de las Semillas estelares ¿Eres uno de ellos? ¡Descúbrelo!
- Viajes entre universos y dimensiones paralelas: ¿diferentes versiones de la Tierra?
- Efecto Mandela: recuerdos de algo que «no sucedió»… ¿cruce de universos? ¿cambio en la realidad?
«Julieta», también agrega lo siguiente:
Alguna vez busqué esta respuesta. La sensación de no pertenecer la tuve, me pasaron muchas cosas extrañas, así que traté de mantener la cordura porque pensaba que mi mente me jugaba una mala pasada.
Pero sí, me levanté un día y vi mi cuerpo como si fuera el de otra persona y no mío, me vi las manos y era como estar en un mal sueño. Pensé en mi familia y no sentí el mismo amor, no era un amor de hija hacia su mamá… Sino de alguien a quien una señora crío y formó, sentía agradecimiento hacia mi mamá y mucha tristeza por ella. Sentía nostalgia, quería irme y estar donde sea el lugar al que extraño, ni siquiera yo sé que es, pero lo necesito. Por primera vez sentí que no pertenecía a este mundo, extrañé con todo mí ser a algo que desconozco pero que siento que me hace falta, es una sensación inexplicable.
Es muy largo de contar, trato de no perder la razón. Encontré mi sentido estudiando para poder ayudar a las personas, es lo único con lo que siento motivación y ganas de Seguir”.
Las almas viejas pueden durar una vida sintiendo que no pertenecen a lugar en el que viven, a la sociedad con la que conviven o, incluso, como en este caso, ni siquiera pertenecen a la familia que tienen.
Extrañar algo que desconocemos es una señal inequívoca que tuvimos algo muy querido en otra vida, en otro tiempo, en otro plano espiritual y que lo deseamos de vuelta.
Como ellos, muchas otras personas sufren estos «síntomas», por llamarlos de alguna manera, pero no hay que temer, de hecho, podría ser un indicador de que nuestra vida tiene un significado más profundo del que pensamos.
Si alguna vez has experimentado que no perteneces a este mundo, no pasa nada malo en ti, no te preocupes por lo que los demás puedan decir de ti, ni busques ser aceptado, trata de hallar tu propósito en la vida, lo que te apasiona.
Una publicación de CodigoOculto.com – Todos los derechos reservados. Prohibida su copia y uso en otros medios, sin autorización.
mil gracias de nuevo erick por cierto mi segundo nombre es igual al tuyo tocato que dios o el ser superior como prefiero llamarlo te colme de bendiciones gracias por compartir tu sapienza muchaho¡
Buenas, mi nombre es P. y quisiera decir una cosa. A mi me pasa algo parecido, nada más que quiero ayudar a las personas y no soporto a la gente que emite energía negativa e intento cambiarla o ayudarla a que suba a otro nivel de conciencia, si no sufro y no puedo seguir viviendo en mi entorno, ya sea estudiantil, familiar o del tipo que sea. Siempre pienso que soy de otro lugar porque no entiendo nada de la gente de mi alrededor, y me gustaría contar mi vida porque es muy curiosa, que creo que he estado predestinado a esto, ya que sufrí una experiencia traumática muy fuerte y a raíz de una técnica llamada emdr, logré encontrar la paz y elevarme a un plano de conciencia superior. Es muy difícil vivir así, porque cambias radicalmente y sólo te llena ayudar al projimo o cada acción que lleves a cabo te asegures de que no dañará tu entorno ni a nadie de tu alrededor, ya sea el medio ambiente o a las personas. Quisiera decir que tengo dentro de mi la misión o el instinto de irme andando sólo por el planeta a descubrir cosas que creo que por destino o porque inconscientemente las voy buscando que me serán de utilidad para descubrir la verdad y ayudar al mundo a ser un lugar mejor. Sólo me llena eso, y lo demás me resulta vacío. Odio el dinero, odio las metas vacías y me pasa eso de la decepción profunda de ver a gente con metas vacías y valores antiguos que generan mal a su alrededor y soy incapaz de cambiarlos por miedo a hablarles y decirles la verdad. La verdad es que me gustaría encontrar a alguien como yo, y si pudieras darme el nombre de algún foro o de alguna web, te lo agradecería. O incluso crear un sito con la gente que te ha dejado esos comentarios para poder hablar con ellos y sentirme por lo menos desahogado o encontrar respuestas a lo que me pasa. Yo soy consciente en este momento de que tengo que dar ese paso de irme con lo puesto y sin nada, sin móvil, ni comida ni nada. A andar por el mundo y tengo la fe de que aleatoriamente me voy a encontrar con gente como yo y voy a luchar por un mundo mejor. Siempre he soñado o creido con una organización de gente que se dedique a eso y encontrarla por mi camino o fundarla yo con más gente que piense como yo y contribuyamos de alguna manera a todo esto. A día de hoy no lo hago porque me da pena mi familia y a mi abuela le quedan pocos años de vida y quisiera disfrutar de ella, pero realmente ya no soy feliz con ellos y necesito un cambio que me aporte todo esto. Dicho esto agradezco sus contribuciones y ojalá encuentre la fuerza para ser alguien que aporte algo positivo al mundo, emprenda o descubra algo que pueda aportar felicidad a la humanidad. Este sería mi gran sueño.
Así como P. menciona, de igual manera me siento, me he aislado, sigo viendo amigos y famliares pero no siento ese amor como el que se supone debo tener y no porque no los quiera pero siento que “algo me llama”, he viajado sólo y en esos lugares algo medice que me quede y no me vaya, he estado en el desierto, el bosque y la selva, y siento esa invitación a adentrarme, aunque siempre he estado acompañado y gracias a ellos no me metido profundamente allí, pero desde muy joven sentí una especie de llamado, amo a los animales, ayudar a otros, curiosamente los animales orbitan a mi al rededor, así como las personas con problemas o necesitades, disfruto ayudarlos aunque he aprendido a poner límites, pero vivir en la ciudad, a pesar de que me gusta, se ha vuelto complejo, casí no hablo de esto con nadie porque puedo percibir las risillas o miradas pícaras o socarronas, he implorado por ayuda al universo y espero hallar mi camino y misión, hago cosas pero me aburro en cuanto las aprendo, he sentido ganas también de soltar todo, sin dinero, no móvil, ni nada, sólo salir y caminar y caminar y caminar…, tengo 47 años, y me frustra en cierto modo no sentir que pertenezco a mi ciudad, mi familia, es extraño, me vienen mil ideas a mi mente pero no logro concretar ninguna, pero si se trata de ayudar a otros, al entorno digo va que va, sin embargo no se ha dado la oportunidad, me gustaría también hacer o contribuir con una organización sin fines de lucro, pero han rechazado mis postulaciones, no sé, en fin cuanto dure esto, espero poder cumplir mi propósito en este planeta…,