¿Qué se está cocinando en las siniestras mentes que dirigen las más grandes potencias militares en el planeta? ¿Cuáles son los verdaderos motivos para realizar ensayos nucleares en eventos que se presentan como juegos consecutivos?

EE.UU., Rusia y Europa han planeado juegos de guerra nuclear casi concurrentes en todo el mundo, probando sus capacidades estratégicas en caso de conflicto.

El Comando Estratégico de lEE.UU. inició este viernes sus «ejercicios anuales de comando y control» denominados «Global Thunder» y «Vigilant Shield 20» junto con el Comando de Defensa Aeroespacial de América del Norte y el Comando Norte de EE.UU. Los simulacros fueron diseñados para «evaluar todas las áreas de misión de USSTRATCOM y la preparación operativa de capacitación conjunta y de campo, con un enfoque específico en la preparación nuclear».

El Comando Estratégico de EE.UU. dijo en un comunicado:

Este ejercicio emplea operaciones globales en coordinación con otros comandos de combate, servicios, agencias gubernamentales apropiadas de EE.UU. y aliados para disuadir, detectar y, si es necesario, derrotar ataques estratégicos contra EE.UU. y sus aliados”.

Arsenales mundiales de armas nucleares según lo estimado por la Federation of American Scientists a diciembre de 2017. Crédito: statista

También en Rusia

Mientras tanto, en Rusia, el presidente Vladimir Putin acaba de concluir su propio ejercicio «Thunder 2019», que involucra a unos 12.000 soldados, cinco submarinos nucleares, 105 aviones y 213 lanzadores de misiles. La exhibición intercontinental de tres días que concluyó el jueves incluyó el lanzamiento de misiles balísticos y de crucero con capacidad nuclear en la República de Komi de Rusia, la provincia de Arkhangelsk y el extremo oriental de la península de Kamchatka.

El ejército ruso probó una variedad de armas, incluido el misil balístico intercontinental RS-24 Yars (ICBM), el misil de crucero Kalibr 3M-54, el misil balístico Sineva y el sistema de misil de crucero móvil de corto alcance Iskander-K, todos capaces de estar equipado con armas nucleares. También se probó el avanzado sistema de misiles tierra-aire S-400.

Rusia prueba un misil balístico intercontinental RS-24 Yars (ICBM) en el Cosmódromo de Plesetsk en Mirny, provincia de Arkhangelsk, el 17 de octubre, como parte de los ejercicios de las Fuerzas de Misiles Estratégicos Thunder 2019. Crédito: Ministerio de Defensa de Rusia

Al día siguiente, cuando el Pentágono anunció su propio entrenamiento nuclear, el Ministerio de Defensa de Rusia dijo que proporcionaría nuevos simuladores del vehículo antisabotaje de combate Typhoon-M que protege sus misiles con capacidad nuclear. Según los informes, las unidades podrían «simular en el espacio virtual la dinámica del movimiento de la unidad en cualquier condición extrema, teniendo en cuenta el terreno, las diversas superficies de la carretera y otros obstáculos».

También en Europa

En otras partes de Europa, sin embargo, se estaban llevando a cabo maniobras mucho más secretas relacionadas con la energía nuclear, y los EE.UU. volvieron a involucrarse. La alianza militar occidental de la OTAN realizó el ejercicio «Steadfast Noon» en el que participaron aviones de combate alemanes Tornado que transportaban bombas nucleares estadounidenses B-61, informó el viernes Deutsche Presse-Agentur.

Aviones de Italia y otras naciones de la OTAN estuvieron involucrados en los ejercicios que incluyeron aviones que despegaban de la Base Aérea Büchel de Alemania y la Base Aérea Volkel de los Países Bajos. Hans Kristensen, director del Federation of American Scientists’ Nuclear Information Program, señaló a la tienda que los bombarderos estadounidenses B-52 acababan de llegar a Europa poco antes del ejercicio.

Ejercicios militares

La OTAN no ha publicado información oficial sobre este ejercicio, y nunca ha confirmado si había o no armas nucleares estadounidenses en la base aérea de Büchel. Sin embargo, el sitio se encontraba entre los incluidos en un informe de la OTAN publicado accidentalmente en julio por el periódico belga De Morgen.

La Base Incirlik en Turquía también estuvo involucrada, algo que se ha vuelto controvertido debido a las relaciones recientemente tensas entre Washington y Ankara, especialmente por la compra de este último del S-400 de Rusia y su invasión del norte de Siria. Cuando se le preguntó sobre la seguridad de hasta 50 bombas B-61 allí, el presidente Donald Trump dijo el miércoles que «estamos seguros y tenemos una gran base aérea allí, una base aérea muy poderosa».

Las fuerzas terrestres turcas probaron un sistema de cohetes de lanzamiento múltiple en esta foto compartida el 20 de marzo. Crédito: Turkish Armed Forces

Tras todos estos ejercicios militares el mundo se pregunta: ¿qué se está buscando realmente con estos  juegos nucleares en todo el mundo? Esto huele muy mal.

Fuente: Newsweek